Luz María de la Mora, subsecretaria de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía, comentó que con esto el presidente da un mensaje sobre la dedicación de su gobierno a combatir la corrupción.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, le pidió a su Gabinete no asistir al Foro Económico Mundial de esta semana en Davos para centrar esfuerzos en detener el robo de gasolina y encabezar los operativos tras la explosión en un oleoducto, según la funcionaria de mayor rango que asistió al evento en representación del país.
Al pedir a sus principales funcionarios que cancelen el viaje a la ciudad suiza, AMLO envió un mensaje sobre la dedicación de su gobierno a combatir la corrupción en el país, señaló la subsecretaria de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía, Luz María de la Mora, quien encabeza la delegación.
La medida se traduce en que México despachó la comitiva de menor nivel en los últimos años a un evento en donde sus presidentes eran asistentes habituales.
El mandatario sigue dedicado a captar inversión extranjera, la cual el gobierno estima en unos 20 mil millones de dólares este año, comentó De la Mora en una entrevista durante el encuentro.
El gobierno de AMLO quiere dialogar con el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, para ampliar lazos en materia de libre comercio y espera que los automóviles ingresen libres de impuestos a partir de marzo, de acuerdo con la implementación de un acuerdo previo, añadió.
“Sí, es cierto que iba a venir una delegación a nivel de secretarios de Estado, sin embargo el presidente les pidió quedarse en México para atender la emergencia”, explicó De la Mora. “Esa es la razón que no están aquí. Creo que el mensaje que estamos dando es que para el presidente López Obrador, el tema de combatir la corrupción es central en su agenda y lo está tomando con toda la seriedad”.
A pesar de sus llamados a incrementar la inversión privada en México, AMLO disolvió la agencia promotora de inversiones ProMéxico y traspasó su labor a las embajadas del país en todo el mundo. También asustó a los inversionistas al cancelar la construcción de un nuevo aeropuerto de 13 mil millones de dólares y ha criticado en repetidas ocasiones la reforma energética aprobada por su antecesor, Enrique Peña Nieto, que fue diseñada para atraer más inversión privada y extranjera al sector petrolero mexicano.
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