La Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial explica algunos puntos con los que el país podría posicionar a su industria a nivel global.
Para que México sea competitivo mundialmente requiere: una acción coordinada y conjunta entre el sector público y privado y una política industrial que diseñe mejores condiciones no solo regionalmente, señaló Li Yong, Director General de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI).
“Después de terminar con la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLCAN), México tiene un momento importante con la oportunidad para posicionar a su industria y volverse competitivo e innovador”, dijo Li Yong a los industriales reunidos en la RAI que organiza la Confederación de Cámaras Industriales de México (Concamin).
Expuso que con una política industrial, en la que haya colaboración público y privada, que diseñe mejores condiciones para todas las industrias, que maximice el contenido nacional en sus exportaciones y sume a las pequeñas empresas en las cadenas de valor “Traerá mayor crecimiento económico al país”, apuntó en su conferencia “La industria del Futuro y los Objetivos 2030 de la ONU”.
Destacó la posición clave de México para posicionase como líder en la economía global, pero necesita mayor la capacidad técnica.
“El sector manufacturero siempre ha sido impulsor clave del desarrollo económico, no hay un país que haya alcanzado un estatus más alto sin tener industrialización, los países se vuelven más avanzados a través del proceso de industrialización”, advirtió.
Habló sobre las virtudes del sector manufacturero para impulsar el crecimiento económico de los países y alcanzar los objetivos clave que la ONU tiene fijados en la Agenda de Desarrollo Sustentable 2030.
El sector manufactura ofrece oportunidades especiales para las economías de escalas, se caracteriza por ver hacia el futuro y ser un vínculo para las industria y tiene otros beneficios al ser intensiva en mano de obra; la manufactura contribuye con más del 50 por ciento del empleo global y normalmente ofrece salarios más altos que apoyan a las familias para salir de la pobreza.
“Infraestructura, industrialización e innovación, son tres palabras clave dentro de los objetivos 2030 de la ONU. Estamos en un tiempo de gran innovación en tecnología, algunos le llaman la 4ª Revolución Industrial que hacen los procesos más eficientes pero también cambian la ruta de quienes la adoptan o no”, dijo.
Identificó como los mayores retos para la manufactura, la eliminación de pobreza a través del empleo, el desarrollo sostenible y el desarrollo de habilidades y lo que los países pueden hacer para enfrentarlos, es promover las nuevas tecnologías.
“La mayoría de los países aún están en la etapa inicial de la formulación de una política nacional, la mayoría de las economías avanzadas como Alemania, tienen el término de industria 4.0 para coordinar sus esfuerzos en diferentes comités y promover el diálogo continuo en una prioridad clara. La innovación requiere la vinculación de varios actores, colaboración pública- privada e instituciones académicas”, precisó.
En el evento, la confederación firmó un acuerdo de colaboración con Li Yong, a fin de estrechar la colaboración para apoyar al desarrollo sostenible e inclusivo de México, dijo Francisco Cervantes, líder de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
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