El Inegi informó que la oferta y demanda global de bienes y servicios reflejó una expansión de 3.7% a tasa anual durante el periodo de julio a septiembre.
La oferta y demanda global de bienes y servicios reportó una expansión de 3.7 por ciento a tasa anual con base en cifras desestacionalizadas durante el periodo de julio a septiembre, reveló este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La ‘radiografía’ de la economía nacional mostró su mayor crecimiento en los últimos 15 meses, ya que para observar una mayor expansión hay que remontarse a las cifras del segundo trimestre de 2017, cuando la oferta y demanda coincidieron en un incremento de 4.1 por ciento a tasa anualizada.
Al observar los resultados de manera particular, se pudo observar que el crecimiento por el lado de la oferta se explicó por el alza de 2.6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país, así como del mayor dinamismo que mostraron las importaciones, mismas que arrojaron un incremento anual de 6.3 por ciento.
Por otra parte, al desagregar los componentes que integran a la demanda se pudo observar que el consumo privado, el pilar más importante por el lado de la demanda, registró un ligero ascenso respecto al trimestre anterior, al reportar un alza de 2.1 por ciento en su comparación anual.
Respecto al consumo del gobierno, éste mostró una desaceleración respecto al segundo trimestre del año, al reflejar una expansión de 1.1 por ciento anual. Francisco Flores, economista de Grupo Financiero Banorte considera que esta desaceleración podría explicarse en gran parte por el gasto electoral residual, ya que hubo ciertos proyectos que no pudieron ser finalizados el día de la elección.
Otro apartado que mostró debilidad fue la formación bruta de capital fijo (inversión), ya que los resultados del tercer trimestre reportaron una variación de 0.5 por ciento, cifra que contrasta frente el 1.4 por ciento observado el trimestre pasado.
El especialista de Banorte coincide en que la debilidad de la inversión durante el trimestre fue explicada por una fuerte desaceleración en la construcción (particularmente en agosto y septiembre), así como en la maquinaria y equipo nacional.
“Aunque los componentes importados fueron beneficiados por la apreciación del tipo de cambio tras el proceso electoral del primero de julio”, señaló.
Por último, las exportaciones acumularon un año de crecimiento al apuntar un crecimiento de 9 por ciento durante los meses de julio a septiembre de 2018.
Alberto Ramos, analista económico de Goldman Sachs, espera que la economía nacional crezca 2.1 por ciento en 2018 (la misma tasa de crecimiento que en 2017), pero que disminuya a 1.9 por ciento en 2019 debido, en gran medida, a la incertidumbre que generan las decisiones políticas del gobierno respecto a la inversión nacional y extranjera.
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